miércoles, 15 de febrero de 2012

Tocará pasar por el quirófano

Finalmente lo que tenía que ser una tendinitis de rodilla ha sido una rotura de menisco. Me han dado dos opciones: infiltraciones para reducir el dolor siguiendo con el menisco roto o operar y quitar el trozo roto. En ambas opciones el desgaste de la rodilla se acentuará a medida que entrene por lo que la única diferencia es que con las infiltraciones solamente retrasaré el pasar por el quirófano ya que a largo plazo me tendré que operar de todas maneras. Operar por operar y sufrir por sufrir me operaré lo antes posible.


La parte más negativa de todo es que con el menisco operado no me han dado más de 10 años de carrera deportiva, por lo que cuando pase por quirófano tendré los días contados por lo que a triatlón se refiere. Podré nadar, esquiar, pedalear pero correr estará complicado.

Resumiendo: una vez operado tendré un máximo de 10 años para darlo todo en el triatlón y hacer todas las Ironman posibles ya que una vez mi rodilla diga basta tocará colgar las zapatillas de running y trail. Hablando en plata... Es una puta mierda que tu cuerpo te ponga límites y fechas de caducidad pero tocará acostumbrarse, vivir con ello y buscar alternativas que al fin y al cabo... No moriré por culpa de un menisco.

Adiós a la Half Challenge Calella 2012 y competiciones de los próximos meses. Nuevo objetivo: Ironman 70.3 Lanzarote (noviembre 2012).

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